La Iglesia de San Andrés y Santa Capilla, ubicada en la ciudad de Jaén, es una joya arquitectónica e histórica que sirve como sede de la Santa Capilla y Noble Cofradía de la Limpia Concepción de Nuestra Señora.
La Iglesia de San Andrés tiene sus raíces en un templo mudéjar, cuyos orígenes no están documentados. En 1515, gracias a las generosas contribuciones de Gutierre González Doncel, tesorero del papa León X y protonotario apostólico, se estableció la Santa Capilla. También hubo aportes directos del propio papa León X. Este pontífice autorizó la obtención de tierra de las catacumbas de las iglesias romanas de Santa María del Campo Santo, San Sebastián de las Catacumbas, San Gregorio y Santa Pudenciana. Esta tierra fue esparcida por las bóvedas y criptas de sepultura de los cofrades ubicados bajo la capilla, otorgándole así el título de "Santa".
En 1515, Don Gutierre González Doncel fundó la Santa Capilla y Noble Cofradía de la Limpia Concepción de Nuestra Señora en la iglesia parroquial de San Andrés, después de un intento fallido de fundarla en la antigua catedral. En 1843, la parroquia de San Andrés fue suprimida por orden, pero la cofradía se hizo cargo de la iglesia, manteniéndola en culto y conservándola.
La fachada del templo es muy sencilla, con una portada de piedra que incluye una hornacina con la imagen de San Andrés. El interior presenta una planta basilical con tres naves. El presbiterio está presidido por San Andrés y las naves laterales exhiben retablos barrocos, además de un órgano de grandes proporciones.
La joya de la corona se encuentra en un lateral del final de la iglesia: unas enormes rejas de estilo renacentista, obra del maestro Bartolomé, protegen la Santa Capilla. Esta reja dorada, cargada de simbolismo, representa el misterio de la Inmaculada Concepción con el abrazo de San Joaquín y Santa Ana unidos por un ángel ante la puerta de Jerusalén. El retablo barroco, que preside una capilla con la imagen de la Inmaculada Concepción, sustituye a uno primitivo traído desde Toledo.
La bóveda de la iglesia es una obra de arte, de forma poligonal y decorada con yeserías gótico-mudéjares. La iglesia también cuenta con una sala capitular, presidida por un cuadro de la Inmaculada, y una Sala de Gobierno.
En el gran patio de la iglesia se erige una estatua de bronce en honor al fundador Gutierre González, en el centro de un espacio de estilo renacentista que distribuye las diferentes salas del edificio. Un elegante y prominente torre, de estilo neoclásico, se levanta en la iglesia. El campanario tiene un aspecto semicircular y era tan elevado que los hortelanos podían verlo desde las huertas que existían en el Pilar del Arrabalejo.
De 11 a 12 horas de la mañana, todos los domingos se celebra la Eucaristía, y durante este mismo horario, los visitantes pueden explorar este maravilloso templo.
La Iglesia de San Andrés y Santa Capilla no solo es un lugar de culto, sino también un monumento que refleja siglos de historia, arte y devoción. Su conservación y apertura al público permiten que tanto los fieles como los amantes del patrimonio histórico puedan disfrutar de su riqueza cultural y espíritu.